Nuevo sistema de análisis colorimétrico para la medida de amonio
Analizadores CA80AM
Tan preciso como los equipos de laboratorio, pero en línea
El sistema Liquiline CA80AM utiliza el método de azul de indofenol, principio de medición colorimétrico estándar. Esto proporciona a los gerentes de planta máxima seguridad y precisión en la medición de amonio. El Liquiline CA80AM en línea ofrece valores más rápidamente que las tradicionales mediciones de laboratorio, lo que permite una reacción rápida a las variaciones de cargas de amonio en la entrada y el control de los sistemas de aireación en el reactor. En la salida, el analizador ayuda a alcanzar los valores de amonio conforme con la normativa.
Reducción de la complejidad de instrumentación
El analizador está integrado a la plataforma Liquiline, que el personal de planta ya conoce de otros parámetros de análisis en línea, como el pH o la conductividad. El concepto de plataforma hace que sea posible actualizar el analizador a una estación de medida simplemente mediante la conexión de sensores Memosens. La tecnología Memosens también permite un control total de las muestras, acelerando la puesta en marcha y el funcionamiento.
Muestreo directo según las necesidades del proceso
Las preparaciones de muestras del sistema Liquiline son adecuadas para todos los puntos de control críticos de amonio. Liquiline CAT860 está perfectamente adaptado a las duras condiciones de entrada. Su sistema de limpieza automático (backflush), con solución de limpieza y purga de aire, previene el bloqueo del filtro cerámico. Liquiline CAT820 es la solución estándar para el tanque de aireación o la salida, y se puede adaptar de forma flexible a cualquier planta de tratamiento de aguas residuales.
Bajo consumo y mantenimiento
Los costes de operación de un analizador colorimétrico varían con el consumo de reactivos. Liquiline CA80AM está diseñado con un sistema de refrigeración inteligente y dispensadores ultra-precisos para la dosificación de reactivos. También ofrece funciones de limpieza y calibración automática. Esto garantiza la reducción del consumo y una vida útil del reactivo de hasta tres meses sin intervención. Además, los diagnósticos avanzados con acceso remoto ayudan a los gestores de planta a analizar y solucionar problemas de forma rápida. Esto reduce los costes de mantenimiento y los tiempos de parada.